Una noche PELIGROSA
Ya era hora que apareciera por aquí. Ayer recordábamos en familia el día aquel en el que un profesor anónimo nos descubrió. Era una noche como otra cualquiera, Álex merodeaba por otras habitaciones, mientra que Dani y yo hablábamos tranquilamente y David y Pura preparaban una enorme cama de matrimonio más grande que la mismísima de mis padres.
Todo hasta ahí estaba bien, hasta que empecé a pensar si habría guardias vigilando fuera de este nuestro nidito. Le propuse a David, que ya constaba de 16 añitos, que saliera a ver... De repente, una fuerza sobrehumana empezó a hacer presión sobre la puerta, hasta que se abrió. Era un guardia, el PEOR de todos, el más peligroso y agresivo. A Pura y a mí nos echó, demasiado alterado como para regañarnos. Por lo que supe después, tuvieron que hacer una búsqueda y captura para que Álex regresara a la habitación, mientras Tidós pasaba sus primeros momentos con 16 años con un policía con cara de un enfado considerable.
A los 15 minutos de estar Pura y yo en nuestra 'verdadera' habitación, junto con Marta (galardonada como miss Bordería Italiana), huimos, dispuestas a arriesgar nuestras vidas por pasar otra noche más con nuestros tres chicos favoritos, para eso somos una comunidad ¡D.A.V.I.D.!
Como si de ladronas se tratara, recorrimos el pasillo hasta llegar a nuestra original habitación, en donde teníamos el cepillo de dientes, la comida, mis preciadas gafas, nuestros móviles (ese dolby), etc.
El general habría ido al servicio (la próstata, nadie es perfecto), por lo que pudimos llegar a nuestro destino sin ningún tipo de problemas.
A lo largo de la noche llamaron continuamente a nuestra puerta, pero nosotros, no fuimos tan tontos de abrir ;).
0 comentarios